Las adivinanzas más desafiantes para adultos

Las adivinanzas más desafiantes para adultos

Las adivinanzas más difíciles para adultos:

1. El que la hace, la vende; el que la compra, no la usa. || La cama.
2. Tres hermanas van en fila, todas blancas como la cal. || Los dientes.
3. Va de mar en mar, sin llegar a mojarse. || El sello.
4. De noche se abre y de día se cierra. || El ojo.
5. Dos hermanitos muy juntitos van siempre de la mano. || Los guantes.

Índice
  1. ¡Desafía tu mente con estas 20 adivinanzas difíciles para adultos!
  2. Las adivinanzas más difíciles para adultos
  3. Adivinanzas desafiantes para ejercitar la mente
  4. Adivinanzas retadoras para poner a prueba tu astucia

¡Desafía tu mente con estas 20 adivinanzas difíciles para adultos!

Negro por dentro, verde por fuera; si quieres que te lo diga, espera.

(La aceituna)


En el campo me crié, mi padre me moldeó, al horno me metió y un buen pan me sacó.

(El trigo)


Roja por dentro, verde por fuera; si quieres que te lo diga, espera.

(La sandía)


¿Qué será? Es cosa extraña: cuanto más grande, menos se ve.

(La oscuridad)


Ni clavo ni tornillo, en medio del mar me brillo.

(La estrella de mar)



Tiene dientes y no come, tiene cabeza y no es hombre.

(El ajo)


De verde nacen, de amarillo maduran y de negro se pudren.

(La oliva)


Largo como un poste, redondo como una peonza, todo el mundo espera que en su día aparezca.

(El sol)


Tan pequeño como un gato, y corre que se mata.

(El reloj)


Aunque soy fría, si me das la vuelta, ardo como una tea.

(La medianoche)


Dime qué es lo uno, lo otro y lo otro, para que digas lo uno, lo otro y lo otro.

(El eco)


Tiene ojos y no puede ver, tiene agua y no puede beber.

(El pez)


Alto como una torre, rojo como un tomate, corre mucho y nunca llega tarde.

(El gallo)


De noche va al bosque, de día a la cocina; no habla en el bosque, ni come en la cocina.

(El tenedor)


Una señora muy guapa, siempre está de blanco, pero nunca dice nada.

(La nieve)


Blanca por dentro, verde por fuera. Si quieres que te lo diga, espera.

(La pera)


Blanca es mi vestidura, verde mi corazón, si me mojan pierdo el color.

(La lechuga)


Barba de choclos, llaves de oro; si no lo adivinas, eres un loro.

(El maíz)


Con paso ladino, pisé mil caminos, con siete letras soy nombre de niño.

(Antonio)

Las adivinanzas más difíciles para adultos

Las adivinanzas son un excelente ejercicio mental que pueden hacer trabajar nuestras habilidades de lógica y creatividad. A continuación, te presentamos una selección de las adivinanzas más difíciles para adultos:

Blanco por dentro, verde por fuera. Si quieres que te lo diga espera.

(El coco)


Con mil ojos no puedo ver. Más valgo que mil soles. Por mí todos suspiran, y oro puro es todo lo que toco.

(El sol)


Tiene hojas y no es árbol, tiene corona y no es rey, tiene cuerpo y no es persona.

(La lechuga)


Vuela sin alas, llora sin ojos, pica sin boca, corre sin pies.

(El viento)


Aunque vacío suena, pronto se llena de agua clara y serena.

(El pozo)


Largo como un poste, redondo como un plato, y si no lo adivinas, te dejo otro rato.

(El trompo)


Dos hermanitas en un mismo cuarto, una blanca como la cal y otra negra como el carbón.

(La noche y el día)


Es cosa con cola, y tiene cabeza; ladra sin boca y muerde sin mordida.

(El rayo)


Ayer tarde ceñíroslo y esta mañana os lo quitéis.

(El cinturón)


Verde por fuera, blanco por dentro, si quieres que te lo diga, espera un momento.

(El espárrago)


Sin huesos, sin carne, sin sangre, me mantenía en pie sin ser cosa alguna.

(El guante)


De muy buen parecer, hijo de la albarda; no me dejan ser, si quieren que sea.

(El asno)


Entre el mar y la montaña, salsa y adobo lleva encima.

(El barco)


Ni blanco ni tiznado, ni vivo ni muerto, ni mucho ni poco.

(El huevo)


Camino debajo del sol y no me achicharro, camino debajo del agua y no me mojo.

(La sombra)

Adivinanzas desafiantes para ejercitar la mente

Dicen que sin alas vuelo, sin piernas camino, sin boca hablo.

(El pensamiento)


Del cielo bajó, vestido de blanco, y en el suelo quedó.

(La nieve)


Si bien me buscas, no podrás hallar, si bien me hallas, no podrás buscar.

(El sentido común)


Cruza los prados, cruza los montes, guarda en su vientre muchas fontes.

(El río)


No soy plata, ni oro, pero luzco como el oro y reluzco como la plata.

(El plátano)


Lo fabrican sin fin, lo venden por doquier, lo compra quien no sabe, y lo usa quien no tiene.

(El ataúd)


Si me cortan no lloro, si me queman no muero. La respuesta eres tú.

(El espejo)


Verde nací, amarillo crecí, y a la muerte me acerqué.

(El plátano)


Blanco por dentro, verde por fuera, si quieres que te lo diga, espera.

(El melón)


Del cielo cayó un enjambre, blanco por fuera, amarillo por dentro.

(El huevo)


Fui al campo y me perdí, ¿qué parece la respuesta?

(El maíz)



Cuatro patas tiene un pato, y no puede nadar más bajo.

(El trampolín)


Negra como el carbón, dulce como la miel.

(La cerveza)


A dos le ato, a dos desato, y a todos mato.

(Los zapatos)

Adivinanzas retadoras para poner a prueba tu astucia

Un citadino hace un agujero que no entra en la casa.

(El pico)


Noche cerrada, nada sana, en ella está mi cama.

(El agujero)


Tiene ojos y no ve, tiene agua y no bebe.

(Una máscara)


Amanezco en la calle, corro sin miedo y no soy nadie.

(Las gotas de lluvia)


No es bebida, ni refresco, es una cosita dulce que va al corazón tan fresco.

(El amor)


En el campo me crié, en el campo me cortaron, en la cacerola me echaron.

(El maíz)


Por los montes y cañadas va sin conocer caminos, tiene lazos y cintas, pero no es pescador.

(La seda)


De entre los cerros vengo, y en ellos me crié, tengo la piel muy negra y no sé andar sin mi estandarte.

(La morcilla)


Tiene ojos y no ve, tiene manos y no coge, tiene pies y no anda, ¿quién es?

(Un muñeco)


Yo tenía muchas hijas y todas en un solo cuarto.

(Las uvas)


Pronto subiré y bajaré, y todo el día sin moverme, ¿quién soy?

(El sol)


El que lo inventó no lo quiere, el que lo compró no lo usó, y el que lo usó no lo vio.

(El ataúd)


Tan alta como un gran pino, pesa menos que un comino.

(La sombra)


Tiene capa de color verde, y fuerte madera en su espalda.

(La sandía)


Tiene dientes y no come, tiene lengua y no habla.

(El peine)

¡Espero que estas adivinanzas hayan puesto a prueba tu ingenio y te hayan hecho pasar un buen rato! Recuerda que la diversión y el desafío están presentes en cada una de ellas. ¡Hasta la próxima y que sigan las adivinanzas para adultos!

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